Pura fascinación es cuanto produce respirar en uno de los cielos más puros del mundo, descubrir las estrellas en el mayor telescopio de Francia o desafiar el vacío a 2,877 metros de altitud. Este verano, el Pic du Midi, en la región de Altos Pirineos, celebra 25 años de su apertura al público y para celebrarlo, ha organizado un calendario de eventos únicos que tendrán lugar a lo largo del año.
Desde el año 2000, el Pic du Midi abre sus puertas a los visitantes, ofreciendo una experiencia única a 2.877 metros de altitud. Inicialmente dedicado exclusivamente a la investigación científica y a la astronomía, el Pic du Midi se ha convertido desde entonces en uno de los lugares de visita obligada en el Pirineo francés.
Eventos para celebrar el 25 aniversario del coloso del Pirineo
Para celebrar esta fecha tan excepcional, el Pic du Midi ofrece conciertos excepcionales en la cumbre. Una ocasión única para disfrutar de la música de artistas de renombre, en un marco impresionante. Además, cuenta con concursos; un menú gastronómico especial en el restaurante “Le 2 877”, con especialidades pirenaicas emblemáticas revisitadas con motivo del 25 aniversario; y, ofertas exclusivas para quienes celebren su 25 aniversario en 2025.
Ascender al Pic du Midi
Alcanzar los 2.877 metros de altitud es posible tanto si se dispone de muy buena forma física como si no. Los más valientes pueden ascender al Pic du Midi a pie desde Sainte Marie de Campan. Ahí tiene su inicio la ruta de los porteadores que durante 70 años subieron hasta el coloso, justo antes de la inauguración del primer teleférico en 1952.
Más fácil y cómodo es tomar el teleférico en el Col du Tourmalet que, en sólo 15 minutos, te sube hasta la cima y permite abrazar toda la cordillera del Pirineo; emocionarse en el “Pontón del Cielo”; maravillarse con el planetario; descubrir el “Espacio de Experiencias”; acercarse a las estrellas desde la “Cúpula del Astrónomo”; o, deleitar el paladar en el restaurante “Le 2 877”.
Tocar el cielo desde la cima
El punto de llegada del telesilla de Campbielh permite acceder a los amplios espacios abiertos de Piau, sea cual sea nuestro propósito. En el valle de Badet habitan las marmotas y da paso al lago de Badet o de Laquette. Los más aventureros y curiosos hallan aquí senderos señalizados para explorar en bicicleta de montaña, patinete de senderismo o a pie. Los más contemplativos encuentran impresionantes paisajes y divertidos senderos.
Uno de los cielos más puros del mundo
Durante los meses de verano, se organizan en la cima del Tourmalet (2,115 m), las “Noches Galácticas”. Una oportunidad para que los visitantes contemplen las estrellas tanto a simple vista como con el telescopio. De la mano de guías astronómicos y tras asistir al espectáculo inmersivo Nox en la Maison du Tourmalet, los visitantes pueden saborear la magia del cielo estrellado y descubrir algunos de los cielos más puros que existen.
En las nubes
Sabores locales por todo lo alto
El restaurante más panorámico “Le 2 877” es un auténtico encuentro de sensaciones. A los increíbles sabores de los productos locales se unen las vistas más impresionantes del Pirineo y la combinación no puede ser de más alto nivel. Un restaurante que aúna el diseño contemporáneo con las vistas más impresionantes del Pirineo y los sabores de gran calidad, elaborada con productos locales desde los entrantes hasta los postres.
Experiencia top
Disfrutar de un almuerzo en “Le 2 877”; ver la puesta de sol acompañado de un guía y un conferenciante; observar las estrellas en la “Cúpula Charvin”; y, despertarse con el amanecer es una de las experiencias más increíbles en el Pic du Midi, que ofrece el Pirineo francés.
Reservada a 27 visitantes, la experiencia incluye el almuerzo en “Le 2 877”, donde se degustarán productos locales revisitados y sublimados por la pasión del chef y su equipo. Una tarde noche inolvidables acompañados por un guía y un conferenciante, destinada a admirar la puesta de sol y a descubrir las estrellas a simple vista y a través del telescopio de 400 mm en el corazón de la Cúpula Charvin. Tras unas horas de sueño, el amanecer es otro momento mágico. Es el momento de descubrir las cúpulas científicas y el mayor telescopio en suelo francés, compartiendo la vida de los investigadores.
Senderismo en el bosque y en la Reserva Natural de Néouvielle
Aquí parten numerosas rutas de senderismo que permiten a los visitantes acceder a las puertas de la Reserva Natural de Néouvielle. Payolle, en concreto, situado en el valle de Campan es conocido por su lago, su magnífico hayedo y sus grandes mesetas pastoreadas. Una maravilla para descubrir el “Pequeño Canadá”.