Tras más de una década, el Instituto Cervantes vuelve a hacerse cargo de la enseñanza de español en las instituciones, órganos y agencias de la Unión Europea. El contrato, con un valor máximo de 8,58 millones de euros y una duración prevista de cuatro años, permitirá impartir clases en línea para todo el personal de la UE, además de formación presencial en Bruselas y Luxemburgo. Las clases comenzarán el próximo 22 de septiembre.
La adjudicación de la licitación para formación lingüística coincide con un crecimiento sin precedentes de la demanda de español: la Comisión Europea ha fijado en 130.324 las horas de estudio de esta lengua, más del doble que en el contrato anterior. El español se convierte así en el idioma con mayor crecimiento, por delante del inglés y el alemán y, en número de horas, solo por detrás del francés.
La propuesta del Instituto Cervantes obtuvo la primera posición en el procedimiento de adjudicación con 90,37 de puntuación final. El jurado destacó la coherencia pedagógica del proyecto, con objetivos claros y alineados con el Marco Común Europeo de Referencia (MCER), así como la pertinencia de los contenidos para un entorno profesional europeo, diverso y multicultural. También se valoró muy positivamente la calidad del profesorado y el uso innovador de herramientas digitales, que facilitan el aprendizaje autónomo y el seguimiento personalizado del alumnado.
Con este nuevo contrato, el Instituto Cervantes triplicará su actividad académica en Bruselas y refuerza su papel como referente en la enseñanza y la difusión del español en Europa.
Recuperación de las clases de español
Desde el año 2015, el Instituto Cervantes no impartía clases de español en las instituciones europeas. En el último concurso al que se presentó, en 2020, quedó en segundo lugar con una puntuación total de 87.40 tras el Centre de Langues de Louvain (CLL) de la Universidad de Lovaina, que alcanzó los 88.89 puntos. La misma entidad fue la única adjudicataria de los 8 lotes de lenguas, incluidas el inglés, el francés, el italiano y el alemán. Dicha concesión, fue recurrida ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea que, finalmente, el pasado mes de julio desestimó el recurso de la institución española.
Las licitaciones europeas son por periodos de cuatro años, de modo que en otoño de 2024 volvió a publicarse un nuevo procedimiento para la formación lingüística del personal de la UE al que se presentó el Instituto Cervantes, siendo informado el pasado 6 de junio de que había quedado en primera posición y, posteriormente, el 12 de agosto, firmándose el contrato.
La institución recupera así la enseñanza de español en las instituciones europeas y su papel como socio de referencia en la política lingüística de la Unión.