Las lluvias propias del otoño han tardado en llegar, pero ya comienzan a hacerse notar en gran parte de la península. A ello se suman fenómenos meteorológicos como borrascas y DANA, que durante el pasado fin de semana han afectado a varias regiones y mantienen en aviso a siete comunidades autónomas, según informa la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET). Ante este escenario, Norauto, la cadena de mantenimiento integral del automóvil, subraya la importancia de revisar y preparar el vehículo para evitar imprevistos derivados de estas precipitaciones, tan características de la estación otoñal. Asimismo, la compañía recuerda que saber cómo actuar ante lluvias torrenciales es clave para garantizar la seguridad vial, especialmente cuando estas condiciones adversas sorprenden al conductor en carretera.
Vehículo listo en 10 pasos:
Buen estado de los neumáticos. Unos neumáticos desgastados provocan un menor agarre y menos adherencia. La marca recuerda que la profundidad del dibujo de la banda de rodadura no debe ser inferior a 1,6 mm y recomienda no bajar de los 3 mm para un mayor agarre en situaciones de lluvia.
Se puede comprobar el desgaste localizando los testigos que hay en la banda de rodadura y que pueden variar de una marca a otra, desde el propio logotipo del fabricante hasta un triángulo o las siglas TWI (Tread Wear Indicator). Si el neumático está próximo a ese límite de desgaste, quiere decir que es necesario su sustitución.
Neumáticos adecuados para lluvia. Se trata de los popularmente conocidos como neumáticos de invierno y los “all season” o cuatro estaciones. Los neumáticos de invierno proporcionan un rendimiento excelente en condiciones de lluvia, hielo o nieve, y están diseñados para adaptarse a las condiciones climáticas frías y a las carreteras difíciles. En el caso de los neumáticos “all season” son aptos para utilizar todo el año, ya que cuentan con todas las características de neumáticos de invierno y de verano de forma simultánea.
En el caso de contar con neumáticos de verano, estos deben ser sustituidos, ya que no están preparados para proporcionar un agarre óptimo con frío y lluvia.
Niveles de los líquidos. Hay que revisar y rellenar los líquidos del vehículo si fuera necesario, especialmente el aceite, el refrigerante (nivel y temperatura), el líquido de frenos, el líquido de la dirección asistida y, por supuesto, el líquido del limpiaparabrisas.
Correcto funcionamiento de las escobillas. Tanto las delanteras como las traseras, deben poder hacer un correcto barrido y limpieza de los parabrisas.
“Muchas escobillas están en mal estado después del verano tras una exposición prolongada al sol y las altas temperaturas, ya que la lámina de caucho se degrada. A esto hay que añadir que se deforman si no se han utilizado durante un tiempo prolongado. Por lo tanto, muchos coches llegan al otoño con las escobillas en mal estado y es importante su revisión y sustitución en caso de ser necesario”, apunta Xavi Celda, Responsable de Mercado de Taller de Norauto España.
Funcionamiento del climatizador o el sistema para desempañar los cristales. Con la bajada de las temperaturas es normal que los cristales comiencen a empañarse, lo que sucede por la diferencia de temperatura exterior respecto al interior del vehículo. En este sentido, desde Norauto se recomienda hacer un uso correcto del sistema automático propio de anti-empañamiento de los cristales, tanto delantero como trasero. En caso de no contar con este sistema, se puede dirigir el aire acondicionado al máximo hacia los cristales para eliminar el empañamiento.
Funcionamiento y estado de los frenos. Es fundamental comprobar que las pastillas y discos están en buen estado y que el vehículo frena correctamente. No hay que olvidar que, con lluvia, aumenta la distancia de frenado.
Correcto funcionamiento de las luces y niveladas. No debe haber ninguna luz fundida y, además, deben estar bien niveladas para evitar deslumbramientos. Norauto recuerda la necesidad de encender las luces de posición y de cruce, en caso de no contar las luces diurnas, en los momentos de lluvia para aumentar la visibilidad. Las de niebla sólo son necesarias si la lluvia es muy intensa.
Sin indicadores encendidos en el cuadro de mandos. Ante la más mínima duda, se recomienda realizar una revisión electrónica del vehículo, especialmente cuando éste cuente con una gran variedad de sistemas de ayuda a la conducción conocidos como ADAS. Su correcto funcionamiento es vital.
Coche limpio. Si el parabrisas está lleno de grasa y suciedad, su estado empeorará con las primeras gotas de lluvia, perjudicando enormemente la visibilidad. Además, un coche limpio es más visible.
Equipar el coche con todo lo necesario. En enero de 2026 será obligatorio el uso de la señal V16 conectada y homologada, que sustituirá a los triángulos y que ofrece una óptima visibilidad del vehículo en caso de avería, siniestro o cualquier otro tipo de incidente en carretera.
También es recomendable comprobar que toda la documentación está en regla y, además, se aconseja llevar agua, mantas, kit de primeros auxilios, linterna, extintor y el móvil siempre con batería para estar listos ante cualquier tipo de incidente.
¿Cómo actuar ante una lluvia torrencial si te sorprende al volante?
Desde Norauto se recomienda consultar el tiempo con frecuencia y el estado del tráfico para conocer las previsiones y el estado de las vías. Hoy en día la tecnología permite conocer esta información en tiempo real y, por supuesto, la radio sigue siendo el mejor aliado. Por ello, siempre hay que seguir las indicaciones de las autoridades y evitar circular si las condiciones son desfavorables, aunque la alerta tarde en llegar.