En diciembre de 2025, el Museo de Israel en Jerusalén conmemorará el 60º aniversario de su apertura con una muestra excepcional del Gran Rollo de Isaías en su totalidad, el único manuscrito bíblico completo entre los Rollos encontrados en el mar Muerto. Para muchos de las decenas de miles de visitantes que acudirán a verlo, esta será probablemente la única oportunidad en su vida de contemplarlo.
El descubrimiento de los Rollos del Mar Muerto, los manuscritos más antiguos existentes de la Biblia hebrea, marcó un punto de inflexión en el estudio de la historia del pueblo judío en la antigüedad; nunca antes había salido a la luz un tesoro literario e histórico de tal magnitud. Estos extraordinarios hallazgos arrojan luz sobre un periodo de la historia humana que enriquece enormemente nuestro conocimiento de la sociedad judía en la Tierra de Israel durante los períodos helenístico y romano, así como sobre los orígenes del judaísmo rabínico y del cristianismo primitivo. Por ello, se han convertido en una visita obligada para todo viajero que llega al Estado de Israel.
El Gran Rollo de Isaías se conserva en el Santuario del Libro del Museo de Israel, construido expresamente para albergar los primeros siete Rollos del Mar Muerto. Este emblemático edificio, diseñado por los arquitectos estadounidenses Armand P. Bartos y Frederic J. Kiesler, fue inaugurado el 20 de abril de 1965, un mes antes que el resto del museo. El año 2025 marca, por tanto, el 60º aniversario tanto del Santuario del Libro como del propio museo, una ocasión ideal para exhibir el Gran Rollo de Isaías y presentarlo a una audiencia diversa de edades, religiones y procedencias.
Aunque el Gran Rollo de Isaías es considerado la joya de la corona del Santuario del Libro, solo una pequeña sección del manuscrito original se exhibe habitualmente, debido a las estrictas medidas de conservación. Desde 1968, el rollo se mantiene resguardado, mientras que los visitantes pueden contemplar una réplica completa en el centro del Santuario y un fragmento original en una vitrina lateral. Por ello, la próxima exposición constituirá una oportunidad única para admirar el rollo completo. Con motivo de esta celebración, se presentará en el corazón del museo, en la Galería Bella y Harry Wexner, un espacio que atraviesan prácticamente todos los visitantes.
Estructura de la exposición
La muestra ofrecerá un nuevo enfoque sobre el manuscrito, analizando el rollo tanto como objeto arqueológico como testimonio histórico excepcional. La experiencia permitirá explorar los materiales con que fue elaborado y las huellas de su uso en la antigüedad, antes de su depósito en la cueva, proporcionando una visión integral de su creación y del profundo mensaje que encierra.
El recorrido se inicia en el desierto de Judea, frente a los imponentes acantilados de la Cueva N.º 1, donde fueron hallados los primeros siete rollos. En un ambiente inmersivo, los visitantes revivirán la emocionante historia del descubrimiento, entre ellos el del propio Gran Rollo de Isaías. A continuación, seguirán el camino que recorrió el manuscrito y las manos que lo protegieron hasta su llegada al Santuario del Libro en 1965. El viaje culmina con la oportunidad de contemplar el Gran Rollo de Isaías completo, de más de siete metros de largo, en todo su esplendor, brindando a muchos la posibilidad de encontrarse por primera vez con este monumental documento.
En la siguiente sección, la exposición presentará los resultados de investigaciones recientes que arrojan nueva luz sobre el uso del rollo en la antigüedad. Estos estudios revelan detalles inéditos sobre su elaboración, materiales y función, ofreciendo una comprensión más profunda de cómo fue empleado y preservado por las comunidades antiguas.
Además de su valor arqueológico e histórico, la muestra destacará el significado espiritual y literario del texto. Los visitantes podrán conocer más sobre su escriba, la naturaleza del manuscrito y la trascendencia de sus palabras, esenciales tanto para el judaísmo como para el cristianismo. Entre las profecías más célebres figura la visión de Isaías sobre la paz universal al final de los tiempos:
"Juzgará entre las naciones, será árbitro de pueblos numerosos. De las espadas forjarán arados, de las lanzas, podaderas. No alzará la espada pueblo contra pueblo, no se adiestrarán para la guerra" (Isaías 2:4)