La cadena italiana de restaurantes La Pala ha abierto su segundo establecimiento en Barcelona. Esta apertura llega apenas un año y medio después de la inauguración del primer establecimiento de la cadena en la calle Hospital 34, a escasos metros de Las Ramblas, en el distrito de Ciutat Vella. Ambas operaciones fueron asesoradas por la consultora inmobiliaria Laborde Marcet.
Fundada hace dos años en Barcelona y con una plantilla de alrededor de 15 trabajadores, el empresario italiano Simone Gallo creó La Pala junto a sus dos socios: Carlos Alberto Ríos y Jorman Oswaldo Moreno. La cadena de restaurantes apuesta por seguir creciendo en el centro de la ciudad con la vista puesta en aumentar su presencia en las principales calles comerciales. De hecho, el plan de crecimiento de la compañía es crecer con nuevas aperturas en el centro de la Ciudad Condal a razón de un establecimiento nuevo cada año o año y medio.
Gerard Marcet, socio fundador de Laborde Marcet, asegura que “el mercado de locales comerciales del centro de la ciudad sigue ofreciendo muchas oportunidades para negocios del sector de la restauración. En este caso, el Paralelo barcelonés es una zona que tradicionalmente ha aglutinado una parte importante de la oferta de ocio y de restaurantes de la ciudad, por lo que son las propias marcas las que buscan tener presencia en esta zona”.
Por su parte, Simone Gallo, fundador y creador de La Pala, afirma que “el público objetivo de nuestra cadena no entiende de edades. El estilo de cocina italiana ‘made in Roma’ que ofrecemos va dirigido a un rango muy amplio de la población, desde los más jóvenes hasta los mayores. Tenemos la suerte de hacer felices a todos los gustos, siempre que les guste la comida italiana, ¡claro!”
La Pala debe su nombre a la oferta gastronómica que ofrece: elaboración de la pizza “alla pala”, típica técnica romana para la elaboración de la pizza “al taglio”. Si bien no es la única modalidad de pizza que ofrecen en su carta, pues también se compone de muchos otros productos típicos de Roma como los spaghetti “Cacio e Pepe”, las “crocchette con la porchetta”, así como otros platos como las clásicas pizzas redondas al plato, focaccias, lasañas, ensaladas y postres italianos. Todos los productos principales son importados desde Italia o adquiriros a diario en establecimientos de productos frescos.
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