Un lugar sin apenas electricidad, que aboga por la naturaleza y el turismo sostenible y del que viven más de 50 familias de beduinos. Una auténtica experiencia para conocer.
Si se busca experiencias únicas e irrepetibles, visitar lugares inexplorados, conocer nuevos lugares, pisar territorios desconocidos, descubrir un país desde otro punto de vista... Jordania ofrece pasar (mínimo una noche) en el Feynan Ecolodge, un singular establecimiento en plena biosfera de Dana que hará que te sientas en otra dimensión.
Ubicado en la punta sudoccidental de la reserva de la Biosfera de Dana, Feynan Ecolodge es un lugar único en Jordania (y en el mundo), remoto y autosostenible. Una de las cosas que hacen de él especial es que la mayor parte de su consumo energético tiene como fuente la energía solar. De ahí, que al caer la noche las velas y el fuego tomen el protagonismo para crear una atmósfera de magia.
Además, en el Feynan Ecolodge trabajan exclusivamente los miembros de las comunidades de la zona y el lodge genera ingresos para ayudar en las tareas de conservación y protección del medio y de las especies amenazadas que habitan en la reserva.
La empresa encargada de llevar a cabo este apasionante proyecto es EcoHotels, que junto con los propietarios de Feynan trabajan para generar ingresos y promover el empleo en la zona: producción de velas, confección de tejidos de lana, formación de guías y expertos en la flora y fauna de la Biosfera… Lógicamente y en línea con lo que promueve, Feynan Ecolodge sirve una cocina vegetariana, no permite fumar en sus instalaciones y aboga por el silencio. Uno de los momentos más especiales que se produce cuando uno se aloja aquí es subir a la azotea por la noche y observar las estrellas fugaces mientras un beduino explica cada una de las constelaciones. En definitiva, el encanto de este lugar es su simplicidad que permite conocer de cerca las costumbres y la vida cotidiana de los beduinos.
Desde Feynan se organizan rutas en 4x4, en bici y trekkings para conocer la Biosfera de Dana. Esta es la única reserva en Jordania que aglutina las cuatro zonas biogeográficas del país (mediterránea, la saharo-arábiga, la irano-turaniana y la sudanesa) y es un punto de encuentro de especies de Europa, África y Asia. Dicha combinación de comunidades naturales en una sola zona es única en Jordania. Hasta la fecha, se han registrado un total de 800 especies de plantas y 449 especies de animales incluyendo el gato de las arenas, el lobo de Siria, el cernícalo primilla y la iguana de cola espinosa.
Jordan Trail
Además, el establecimiento es punto de llegada, o una parada más, dentro del Jordan Trail. El camino de 650 kilómetros de longitud que atraviesa Jordania de norte a sur; desde Um Qais, una de las ciudades pertenecientes a la Decápolis, hasta Aqaba, a orillas del Mar Rojo. El trayecto supone una explosión de experiencias para los cinco sentidos, ya que brinda la oportunidad de descubrir Jordania en su totalidad.
La ruta se divide en ocho etapas (Um Qais – Ajloun, Ajloun – Fuheis, Fuheis – Wadi Zarqa Ma’in, Three Wadis – Karak, Karak – Dana, Dana – Petra, Petra – Wadi Rum, Wadi Rum – Aqaba), cada una de ellas basada en una región de Jordania, y recorre 52 pueblos y ciudades, mostrando diferentes paisajes, biodiversidad, historia y cultura local. Aunque el camino se completa entre 36 y 40 días, también puede realizarse por tramos. Cada uno de ellos supone cuatro a cinco días caminando.
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