La pista de esquí de Grandvalira abrirá sus puertas el 26 de noviembre y la de Vallnord lo hará el 2 de diciembre.
El frío ha llegado y Andorra empieza a lucir de blanco. Las estaciones de esquí se preparan para dar el pistoletazo de salida a la temporada de invierno.
El próximo sábado 26 de noviembre -y siempre que las condiciones meteorológicas lo permitan-, Grandvalira, el mayor dominio de nieve del sur de Europa, abrirá sus puertas a los esquiadores. Por su lado, Vallnord, tiene previsto abrir las pistas el 2 de diciembre.
El Puente de la Purísima es para muchos el inicio de la temporada de invierno y una ocasión perfecta para disfrutar de unos días libres en un entorno incomparable y ofertas de ocio para todos los públicos. Tanto para los fans del esquí como los que prefieren otros planes, el Principado ofrece una gran variedad de actividades para disfrutar de la nieve en cualquiera de sus opciones, con amigos, la familia o en pareja.
Diversión en familia
Andorra es el paraíso de pequeños y mayores, prueba de ello son todas las actividades que el Principado propone para pasar unos días inolvidables en familia. Algunos ejemplos son el tubbing, un divertido descenso por la nieve en unos donuts gigantes, ideal para toda la familia y que se puede practicar tanto en Vallnord como en Grandvalira; o descubrir cómo se acondicionan las pistas cuando cae la tarde acompañando a los conductores de los Snow Retracks (las máquinas pisanieve), ¡una auténtica experiencia behind the scenes!
Para los que también quieren relajarse, Caldea-Inúu ha puesto en marcha Likids, el nuevo espacio exclusivo para niños y niñas de 3 a 8 años para que vivan la experiencia y los beneficios de las aguas termales. Y los que prefieran conocer otras facetas de Andorra, el Principado propone a sus visitantes adentrarse en la vida de una familia andorrana del siglo XIX y conocer sus costumbres en una visita a la Casa Rull de Sispony, en La Massana.
Aventura con amigos
Andorra se erige a su vez como un destino perfecto para pasar unos días con amigos gracias a las infinitas propuestas para este público. Así, el speedride cobra protagonismo como nueva disciplina que combina esquí y parapente. La estación de Vallnord-Ordino Arcalís dispone de la primera Escuela de Speedride de los Pirineos, una práctica apta para los más atrevidos y los que ya cuenten con un nivel intermedio de esquí.
Los que prefieren pasarlo bien con los pies en el suelo, encontrarán en el Airboard su actividad ideal. Sobre un pequeño colchón de aire, se deslizarán a toda velocidad pista abajo en el Coll de la Botella del sector de Pal de la estación de Vallnord-Pal Arinsal. La misma estación ofrece el Snow Snake, una actividad que une varios trineos de nieve individuales para iniciar un divertido descenso en grupo.
Después de una jornada de nieve, Grandvalira presenta su oferta más chic en l’Abarset, un punto de encuentro único para todos los esquiadores de Grandvalira.
Desconexión en pareja
Finalmente, Andorra estrena la temporada de invierno con los planes más románticos en la nieve para parejas, como el mushing, un paseo en trineo tirado por perros que se puede practicar tanto en Grandvalira como en Vallnord y contemplar los impresionantes paisajes durante el recorrido. Después de este paseo idílico, Andorra propone terminar la velada cenando en alguno de los restaurantes más especiales del Principado, como la Bodega Poblet, en Andorra la Vella, o la Enoteca, en Escaldes-Engordany.
Para pasar una noche romántica y diferente, el Principado ofrece infinitas opciones. Era de Casa Mariola, en Ordino, es la opción perfecta para descubrir el legado arquitectónico, histórico, natural y cultural de Andorra en un paraje único. Y para un relax total, Inúu, con más de 12.000 m2 y un aforo máximo de 200 personas, es el lugar ideal para desconectar.
Como novedad este 2016 y con motivo de las fiestas navideñas, del 1 de diciembre al 6 de enero se organiza la primera aldea navideña en Andorra la Vella. Un ambiente similar al de un mercado tradicional con más de una veintena de paradas navideñas y con actividades y espectáculos que tendrán lugar en los diferentes ejes comerciales de la capital.
Para terminar de disfrutar de la más completa oferta del país, el Principado propone degustar la cocina típica andorrana en cualquiera de sus bordas, como la Borda d’Erts o la Borda Raubert en la Massana, la Borda Estevet en Andorra la Vella o la Borda l’Era del Rossell en Canillo son algunas de las propuestas más interesantes.