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Está considerada como el auténtico corazón de Holanda gracias a su gran afluencia universitaria, grandes canales, magestuosas plazas llenas de historia y preciosos parques.

Una ciudad ideal para los amantes de la buena vida. Una ciudad con ambiente, historia, arte y cultura. Una ciudad rodeada de bellas zonas naturales y suaves colinas. En Maastricht se puede encontrar todo lo que uno busca.

La Haya es una de las ciudades más especiales de Holanda. No solo porque es la sede del gobierno, sino también por sus muchos monumentos, barrios históricos y por su ubicación privilegiada al lado de la costa.

Róterdam tiene tantas cosas bonitas, emocionantes y atractivas que uno no sabe cual elegir. Por suerte, también ofrece multitud de terrazas y cafés para recuperarse con una bebida y algo de picar. Por la noche, se puede probar todas las cocinas del mundo en los miles de restaurantes de la ciudad.

Una de las ciudades mas visitadas de Europa, gracias a su ambiente histórico del siglo XVII combinado con la mentalidad de una metrópolis moderna, en un entorno agradable y relajado.

Su historia, tradición y cultura, la naturaleza, sus maravillosas playas, la navegación, el senderismo, el ambiente nocturno y como no su gastronomía convierten a Baiona en un lugar fascinante. Un lugar donde podras viajar al pasado; revivir sensaciones perdidas con su historia, mitos y leyendas; y regresar al presente para descubrir que cada rincón tiene algo que contar.

Ciudad con una intensa vida urbana y considerada una de las ciudades con mejor clima del mundo y ciudad con mejor clima de España, cosmopolita y dinámica, donde uno puede encontrar todo lo que pueda imaginar y más.

Ésta es una isla con muchos encantos, como el de sus escarpadas costas en las que la lava ha moldeado el paisaje ofreciendo la posibilidad de darse un baño inolvidable en alguna de sus piscinas naturales. Es impresionante el contraste entre la infinidad del mar y las olas chocando contra la costa. Tradición y cultura unidos por la tierra y el mar.

Un mar azul turquesa, bancos de arena blanca y el verde oscuro de las praderas de posidonia son los colores con los que Formentera recibe al visitante. La pureza y claridad de sus aguas, filtradas por el mayor y más antiguo ser vivo del mundo, la posidonia oceánica, con sus 8 km de extensión y 100.000 años de edad, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, ofrece al visitante playas únicas en el Mediterráneo.

Al sur de Navarra, entre la abrumadora aridez de las Bardenas y el verde intenso de la huerta de la Ribera, se encuentra Tudela, la segunda ciudad en extensión e importancia del territorio foral.

Pasear por las calles empedradas de Temple Bar, disfrutar de una pinta de Guinness en la Guinness Storehouse, dar un paseo por Stephen's Green o unirse a una de las sesiones de música tradicional en los pubs de la ciudad. Dublín ofrece al visitante todo lo que se puede esperar de cultura, historia y mucho más.

La provincia de Cádiz, privilegiada y singular, reúne todos los atractivos que puedan apetecer a quienes valoran el turismo en su verdadera dimensión cultural y festiva, ecológica y monumental, costumbrista, auténtica y esencialmente andaluza.

Ciudad de contrastes: al mismo tiempo vieja y joven, durante el día, es la ciudad de negocios y por la tarde muy relajada; por muchas características es una metrópoli europea pero antes de todo es una ciudad que los visitantes recuerdan por el encanto de su centro y la hospitalidad de sus ciudadanos.

Vigo está diseñada para los que buscan un amplio abanico de opciones: gastronomía gallega, naturaleza, náutica, playas, ocio y el ambiente nocturno más animado de Galicia.