"Para llegar al futuro, debemos hacer una gran reverencia al pasado".
Es una frase de Aída Gómez, una de las mejores bailarinas de la historia de la danza española. El próximo 7 de diciembre dirigirá, en el Teatro José María Rodero (c/ Londres, 3, Torrejón de Ardoz, Madrid) a las 20h, Solos en Compañía, una Gala de Danza en la que, además, participa con su propia agrupación (Compañía Aída Gómez, compañía residente en el Ayuntamiento de Torrejón de Ardoz) y otros nombres que representarán la mejor tradición y los nuevos caminos de la danza escénica española: Antonio Canales, Eduardo Guerrero y Alfonso Losa. El cartel se completará con la guitarra de Pino Losada, el cante de Ismael de la Rosa "El Bola" y José del Calli.
¿Hacia dónde va la danza española? ¿Cómo convivirá la tradición con lo contemporáneo en el clásico español, la bolera, el folklore...? La figura de Aída Gómez es imprescindible para entender la historia de la danza española. Formada en Danza Clásica y Clásico Español, ha pasado por el Ballet Nacional de España, donde ingresó, de la mano de Antonio el Bailarín, en 1982, y en él encarnó, casi desde un principio, los papeles principales de principales obras: Don Juan, Carmen y Bodas de Sangre, brillando especialmente junto a Antonio Gades.
Entre 1998 y 2001 se hizo cargo del propio Ballet Nacional de España: fue la directora más joven de esta compañía y estrenó montajes como Silencio Rasgado (1998) y Mensaje (1998). Participó en el largometraje de Carlos Saura Salomé (2002), y al frente de su Compañía de Danza Española ha firmado trabajos como Suite Española (2003), Carmen (2006), Permíteme bailarte (2008) y Adalí (2012) y ha recibido galardones como el Premio Nacional de Danza en la modalidad de Interpretación en 2004, Premio Juan Bravo a la mejor intérprete (2009), el Premio de la Cultura de la Comunidad de Madrid 2008 y la Gran cruz de la Orden del Dos de Mayo 2015. En 2015 fue nombrada directora del Festival Internacional Madrid en Danza y en 2016 del Festival Suma Flamenca.
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