En el corazón del norte mexicano, entre paisajes indomables y cielos infinitos, se encuentra Durango: un destino que ha sido escenario de leyendas cinematográficas y que hoy se reinventa como joya turística internacional.
Este estado mexicano ha albergado más de 180 producciones cinematográficas, y que hoy se consolida como uno de los destinos turísticos más auténticos del país.
Un destino tan visualmente impactante como culturalmente profundo
Un cruce entre desierto y sierra
Ubicado en el noroeste de México, el estado de Durango es una joya geográfica enclavada entre la Sierra Madre Occidental y las vastas llanuras del desierto mexicano. Limita al norte con Chihuahua, al este con Coahuila y Zacatecas, al sur con Nayarit y al oeste con Sinaloa. Su capital, Victoria de Durango, se sitúa a poco más de 800 kilómetros de Ciudad de México y a unos 300 kilómetros del Pacífico. Esta posición estratégica ha convertido a Durango en un puente natural entre el norte y el centro del país, y en un escenario perfecto para capturar la esencia del México más auténtico y cinematográfico. La mezcla de paisajes agrestes, montañas imponentes, cañones y cielos interminables lo convierte en un destino tan visualmente impactante como culturalmente profundo.
‘Durango, un mundo de cine’, campaña de promoción turística del estado
“Durango es un lugar donde uno puede vivir un día de película. Tenemos espectáculos en vivo, paseos en carretas, montas a caballo, gastronomía tradicional y una oferta cultural ligada al cine que fascina tanto a turistas nacionales como extranjeros”, explica Elisa María Haro Ruíz, secretaria de Turismo del Estado de Durango. Y añade: “La campaña Durango, un mundo de cine ha despertado el interés del público europeo. Estamos posicionando al estado como una alternativa cultural, histórica y experiencial de primer nivel”.
Donde la realidad supera a la ficción
Durango no necesita escenografías. Sus paisajes hablan por sí solos. Su geografía es un espectáculo natural de montañas escarpadas, desiertos dorados, ríos ocultos y cañones profundos, que han seducido a los grandes estudios de cine desde mediados del siglo XX.
Su luz, única en México, ha sido catalogada como la más cinematográfica del país: una mezcla de claridad intensa y sombras dramáticas, perfecta para los encuadres del western clásico y, al mismo tiempo, ideal para capturar la poesía de sus pueblos coloniales, calles empedradas, haciendas centenarias y panoramas rurales.
Durango y el cine: una historia que comenzó con John Wayne
Todo empezó en 1954. El legendario John Wayne llegó a Durango para filmar The Bullfighter and the Lady. Quedó tan impresionado con la belleza del entorno, la calidez de la gente y la facilidad para rodar que volvió en múltiples ocasiones, rodando allí varios de sus clásicos del oeste.
Durante las décadas de los 60 y 70, más de 140 películas de Hollywood se rodaron en Durango
Durante las décadas de los 60 y 70, más de 140 películas de Hollywood se rodaron en Durango. El estado se convirtió en uno de los platós favoritos del cine internacional. Su parecido con el suroeste estadounidense, sus vastos terrenos sin urbanizar y su bajo coste atrajeron a los estudios como un imán.
Algunas películas rodadas en Durango:
- The War Wagon (1967), con John Wayne y Kirk Douglas.
- The Wild Bunch (1969), de Sam Peckinpah.
- Blue (1968), dirigida por Silvio Narizzano.
- Caveman (1981), comedia prehistórica con Ringo Starr.
- ¡Águila o Sol! (1937), con Mario Moreno “Cantinflas”.
- Zapata: el sueño del héroe (2004), de Alfonso Arau.
- El Mexicano (2003), con Antonio Banderas y Salma Hayek.
Set de película, destino real: el turismo cinematográfico
Uno de los grandes aciertos de Durango ha sido convertir sus sets en verdaderas atracciones turísticas. Muchos de los escenarios construidos para películas se han preservado o restaurado, y hoy forman parte de rutas temáticas que permiten a los visitantes vivir su propia experiencia cinematográfica.
Lugares imperdibles para vivir “Un mundo de cine”:
Paseo del Viejo Oeste: espectáculos con actores caracterizados, duelos ficticios, shows con caballos y escenas recreadas de películas clásicas.
Chupaderos: antiguo set western convertido en pueblo turístico, con cantinas, cárcel, saloon y calles de tierra.
Rancho La Joya: legendario escenario natural utilizado por John Wayne, hoy parte del circuito turístico.
Punto Cine Durango y Paseo de las Estrellas: espacios urbanos en la capital donde se rinde homenaje al cine.
En estos lugares, el visitante no solo observa, sino que participa. Se viste como vaquero, monta a caballo, presencia tiroteos coreografiados y come en escenarios reales donde alguna vez estuvieron las cámaras de Hollywood.
El cine como patrimonio y motor de desarrollo
Durango ha sabido actualizar su propuesta cultural y cinematográfica.
Durango es el estado con la luz solar más hermosa de México que tanto enamoró a los directores de fotografía de Hollywood
El Museo del Cine conserva vestuarios originales, cámaras antiguas y piezas únicas de producciones legendarias.
El Festival Internacional de Cine de Durango convoca a cineastas emergentes y consolida la identidad creativa del estado.
El Centro de Cinematografía y Actuación Dolores del Río forma nuevas generaciones de artistas y técnicos del séptimo arte.
Además, se han creado rutas guiadas por expertos en cine, que combinan historia, anécdotas de rodaje y visitas a locaciones reales.
Mucho más que cine: gastronomía, historia y tradición
Durango no es solo cine. Su cocina regional es un atractivo en sí misma. El caldillo durangueño, las gorditas rellenas, el asado rojo y los dulces de leche conquistan paladares. Sus mercados locales y cocinas tradicionales son perfectos para quienes desean sumergirse en la cultura local.
En su capital, la ciudad de Victoria de Durango, el visitante puede disfrutar de su centro histórico, con edificios coloniales, templos barrocos, museos y teatros. Los túneles subterráneos del siglo XVIII, la catedral basílica y el teleférico panorámico son solo algunos de los imperdibles.
Y para los amantes de la naturaleza, el Parque Nacional Sierra de Órganos y la Reserva de la Biósfera La Michilía ofrecen rutas de senderismo, fotografía y observación de fauna silvestre.
Una luz que nunca se apaga
Durango es también el estado con la luz solar más hermosa de México, y esa luz —que tanto enamoró a los directores de fotografía de Hollywood— sigue iluminando los pasos de miles de viajeros que buscan autenticidad.
En un mundo saturado de destinos artificiales, Durango ofrece un viaje con alma, donde cada rincón tiene historia, cada comida sabe a tradición y cada mirada parece un encuadre de película.
Ven a vivir tu propia película
Durango no es solo una locación. Es un personaje, con carácter, pasado, voz y mirada propia. Su desierto ha sido escenario de epopeyas fílmicas, pero también es hoy refugio para quienes buscan una conexión real con la historia, la cultura y la belleza natural de México.
Viajar a Durango es viajar al corazón del cine, sí, pero también al corazón de un país que mira hacia el futuro sin perder sus raíces. Una tierra que invita a soñar, a explorar y a vivir intensamente… como en una gran película.