El archipiélago de Fernando de Noronha, consta de 21 islas y tiene playas cristalinas verdaderamente paradisíacas. De entre todas, destacan 10 playas que ofrecen diversión para todos los gustos, como rutas de senderismo o paseos en barco.
Se le conoce como el desierto brasileño. Su ecosistema cuenta con 155 mil hectáreas de paisaje deslumbrante. Las aguas, atrapadas entre dunas, forman verdaderos oasis tropicales. Hasta septiembre las lagunas tienen niveles elevados que permiten atravesarlas.
Datos curiosos sobre la historia del impresionante Cristo Redentor de Río de Janeiro desde su idea hasta su consagración como símbolo turístico de Brasil.